Ingredientes para la pasta (3/4 personas):
Tengo que aclarar que en esta ocasión utilicé la misma masa con que hago los raviolis. Ambas recetas las aprendí en Bonsfocs.
Los ingredientes tienen que estar a temperatura ambiente.
- 125 g de harina blanca (la 00 italiana es la ideal, ¿no la encuentras? que sea floja)
- 125 g de semolina de grano duro (la marca italiana DeCecco está muy bien, pero si no en cualquier supermercado árabe podéis encontrar otras marcas)
- 2 huevos
- 1 yema
- Agua
- Sal
Ingredientes para la carbonara:
- 4/5 salchichas
- Aceite de oliva
- 4 lonchas de panceta picadas
- Sal y pimienta negra
- 4 yemas de huevo grandes
- 100 ml de nata líquida
- 100 g de parmesano rallado
- La piel de un limón
- Un poco de perejil picado
- Mezclad bien las dos harinas y haced un volcán en la zona de trabajo.
- Añadid en el centro los huevos, la yema y unos 5 g de sal.
- Con un tenedor, batid los huevos, incorporando poco a poco la harina de los lados. Se repite la misma imagen del iceberg cayendo por el efecto invernadero que al elaborar los gnocchis.
- Amasad hasta que consigáis una masa firme que no se pegue a la mesa. No esperéis una masa como la del pan, es más dura. Tendréis que amasar plegando y estirando.
- Dejad reposar la masa unos 30 minutos envuelta en un film.
- Cortad la masa en dos partes y estirad con un rodillo. A mi me gusta que quede bien fina. La pasta crece al hervir. Para esto os lo vais a tener que currad un poco.
- Tenéis que conseguir una lámina muy fina en forma de rectángulo, cortando los lados de masa que sobre si es necesario.
- Dejad secar un poco las láminas antes de empezar a cortarla.
- Una forma fácil de cortar los tallarines es plegar la masa con cariño en 3 a lo ancho como si fuera una hoja de papel y cortad los tallarines bien finos con la ayuda de un cuchillo afilado.
- Id espolvoreando con semolina una vez cortados para que no se peguen entre ellos.
- Con un cuchillo afilado, cortad la piel de las salchichas a lo largo y sacar la carne. Con las manos húmedas haced pequeñas albóndigas y reservadlas.
- Calentad en una sartén un buen chorro de aceite y saltead con cuidado las albóndigas hasta que estén doradas por todas partes.
- Añadid la panceta hasta que esté dorada.
- Mientras tanto, poned agua a hervir con sal en una cazuela y echad los tallarines. Dejad hervir unos 5 minutos (probad antes).
- En un bol, batid las yemas de huevo, la nata, la mitad del parmesano, la ralladura de limón y el perejil.
- Cuando la pasta esté cocida, escurridla con un colador, reservando un poco del agua de la cocción.
- Mezclad inmediatamente la pasta con las yemas batidas y echadlo todo de nuevo en la cazuela de la pasta.
- El huevo se cocerá suavemente sin llegar a cuajarse.
- La salsa debe quedar suave, si os queda pegajosa añadidle unas cucharadas del agua de la cocción.
- Echad el resto de parmesano por encima, corregid de sal y pimienta.
M'encanta fer-me la pasta! És súper fàcil i la diferència amb la comprada al súper és immensa… Sobretot si és farcida! Felicitats, t'han quedat unes tallarines estupendes!
Gràcies! Sí, que està bona sí.No té ni punt de comparació. I tens raó, no es gens complicat 🙂